La calabaza y el camote son dos superalimentos que se deberían consumir todo el año y no quedar relegados solo a la temporada de otoño. Sus beneficios nutricionales y su versátil manera de prepararse los hacen muy útiles en la cocina, tanto para sopas como para postres.
Los beneficios de la calabaza
Además de ser un fruto poco azucarado por sí mismo es un alimento cargado de vitaminas, fibra y potasio, lo que la convierte una gran aliada para el bienestar de los ojos, un escudo protector para el corazón debido a sus altos niveles de potasio, vitamina C y antioxidantes, y sus carotenoides combaten el cáncer. Además, es hipocalórica: se calcula que una taza de calabaza cocida contiene solo 50 calorías. El problema son los azúcares que se le agregan de manera descontrolada.
Los beneficios del camote
Un camote contiene más del 100 por ciento de la vitamina A que se necesita al día, lo que ayuda a mantener un sistema inmunológico fortalecido, además, protege los ojos, el corazón y los riñones. También contiene calcio, zinc, vitamina C, hierro, magnesio, fósforo y tiamina. Su índice glucémico es muy bajo, lo que lo hace apto para las personas con algún trastorno metabólico y ayudan a reducir la inflamación del cuerpo.
Receta del dulce de calabaza y camote para Año Nuevo
Ingredientes
- 4 camotes bien lavados partidos en trozos
- 3/4 de calabaza partida en pedazos pequeños (las semillas son opcionales)
- 1 barra de piloncillo, lo más natural posible
- 4 clavos de olor
- 1 rodaja de canela
- 3 pimientas gordas
- 3 anís estrella
En una cacerola con agua se ponen a hervir los trozos de calabaza y camote hasta que se suavicen, luego se agrega la barra de piloncillo, la canela, los clavos, el anís y las pimientas. Se tiene que mover constantemente para que el dulce se desbarate bien y todos los ingredientes se incorporen. El punto perfecto de finalización se indica cuando un tenedor puede desbaratar la fruta y el tubérculo.
Se sirve en un plato, se le puede agregar un poco de leche y tantita canela espolvoreada.