En el mundo de la gastronomía, no solo importa lo que se sirve en el plato, sino también cómo nos comportamos alrededor de la mesa.
Martha Debayle, una experta en etiqueta y modales, a lo largo de su trayectoría ha dado algunos consejos esenciales para hacer de cualquier comida una experiencia aún más agradable.
Aquí te dejamos los puntos clave para lucir elegante, respetuoso y seguro al momento de compartir una comida, ya sea en casa o en un restaurante.
1. La puntualidad es clave
Ser puntual es una de las primeras señales de respeto hacia los anfitriones y otros comensales. Si la cita es para una comida o cena, procura llegar a tiempo. Si por alguna razón llegas tarde, avisa con anticipación.
2. La presentación personal es importante
Antes de sentarte a la mesa, asegúrate de estar bien arreglado. Un atuendo adecuado para la ocasión no solo te hace lucir bien, sino que también transmite respeto por los demás y por el evento.
3. El uso correcto de los utensilios
En la mesa, el orden de uso de los utensilios es fundamental. Comienza con los cubiertos que están en el borde exterior y ve hacia adentro conforme avanzas con los platillos. Recuerda que el cuchillo va en la mano derecha, la tenedor en la izquierda, y el cuchillo debe estar con la parte cortante hacia adentro, hacia el plato.
4. Manejo del pan y otros alimentos
Cuando rompas el pan, hazlo en pequeños trozos, nunca lo muerdas entero. Es un gesto de cortesía y refinamiento. Además, si estás comiendo en una mesa formal, no se debe untar mantequilla en el pan de inmediato. Espera que el anfitrión o el mesero lo sirvan adecuadamente.
5. La hora del brindis ¿Qué hacer con las copas?
Si estás bebiendo vino, no tomes la copa por el cáliz, siempre por el tallo para evitar calentar la bebida. Además, recuerda que el brindis debe hacerse de manera corta y elegante, sin interrumpir demasiado el flujo de la conversación.
6. Refrescos para invitados
Jamás lleves latas a la mesa, ocupa unas fundas especiales o calcetín para cubrir las latas y que se vean espectaculares. Jamás lleven un zepellin de 2 litros a la mesa, es lo peor y mal visto.
7. La conversación en la mesa
Martha sugiere evitar hablar de temas controvertidos o demasiado personales durante las comidas. Las mejores conversaciones giran en torno a temas neutros que todos puedan disfrutar. Además, es preferible escuchar más que hablar, sin interrumpir a los demás.
8. Agua para beber
Cuando alguien solicité un vaso con agua, jamás lo lleves con una servilleta nada más. Lleva una pequeña charola, con una jarrita de agua, un contenedor de hielos y el vaso para que tus invitados se sirvan la cantidad que quieran.
9. Comer con la boca cerrada
Es un clásico, pero nunca está de más recordarlo. Comer con la boca cerrada no solo es un signo de educación, sino que también hace que la experiencia sea más agradable para todos.
10. Evitar el uso excesivo del teléfono móvil
Si estás en una comida formal o en la compañía de otros, mantén tu teléfono en silencio y evita revisarlo constantemente. Si necesitas hacer una llamada urgente, hazlo en un lugar privado y no en la mesa.
11. La postura correcta
Mantener una postura erguida es señal de respeto. Evita encorvarte o hacer ruidos innecesarios al comer. Al sentarte, procura que tus codos no se apoyen sobre la mesa, solo las muñecas. Esto te permitirá mantener una actitud sofisticada y educada.
12. Finaliza tu comida con elegancia
Una vez que hayas terminado, coloca tu tenedor y cuchillo en paralelo sobre el plato, con los mangos apuntando a la derecha. Esto es un indicativo de que has terminado y es el momento de que los anfitriones recojan los platos.
13. El agradecimiento
No olvides agradecer a la persona que te ha invitado, tanto antes de la comida como después de haber terminado. Un simple “gracias por la invitación” o “todo estuvo delicioso” nunca pasa desapercibido.
Martha Debayle nos recuerda que los buenos modales en la mesa no solo reflejan nuestra educación y respeto hacia los demás, sino que también mejoran la calidad de la experiencia gastronómica. Aplicar estos sencillos pero poderosos consejos nos ayudará a crear un ambiente agradable, elegante y, sobre todo, muy disfrutable en cada encuentro alrededor de la mesa.
