Los boneless son un platillo popular que se trata de trozos de pollo sin hueso que se empanizan y se fríen. Los boneless se pueden preparar de diferentes maneras, pero una de las variantes más populares es la que utiliza frituras como papas doritos, o cheetos.
A continuación, te compartimos tres recetas de boneless hechas con frituras:
Boneless de pollo con papas doritos
Estos boneless tienen un sabor delicioso y crujiente. La combinación de la carne de pollo con el sabor de las papas doritos es perfecta.
Ingredientes:
- 500 gramos de pechuga de pollo, cortada en trozos pequeños
- 1 taza de harina de trigo
- 1 huevo, batido
- 1 taza de papas doritos molidas
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
- Corta la pechuga de pollo en trozos pequeños.
- En un recipiente, mezcla la harina de trigo, la sal y la pimienta.
- En otro recipiente, bate el huevo.
- En un tercer recipiente, coloca las papas doritos molidas.
- Pasa los trozos de pollo por la harina, luego por el huevo y finalmente por las papas doritos molidas.
- Calienta suficiente aceite en una sartén a fuego medio-alto.
- Fríe los boneless en lotes hasta que estén dorados y cocidos por dentro, aproximadamente 4-5 minutos por lado.
- Sirve inmediatamente con tu salsa favorita.
Boneless de pollo con cheetos
Estos boneless tienen un sabor delicioso y picante. La combinación de la carne de pollo con el sabor de los cheetos es irresistible.
Ingredientes:
- 500 gramos de pechuga de pollo, cortada en trozos pequeños
- 1 taza de harina de trigo
- 1 huevo, batido
- 1 taza de cheetos molidos
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
- Corta la pechuga de pollo en trozos pequeños.
- En un recipiente, mezcla la harina de trigo, la sal y la pimienta.
- En otro recipiente, bate el huevo.
- En un tercer recipiente, coloca los cheetos molidos.
- Pasa los trozos de pollo por la harina, luego por el huevo y finalmente por los cheetos molidos.
- Calienta suficiente aceite en una sartén a fuego medio-alto.
- Fríe los boneless en lotes hasta que estén dorados y cocidos por dentro, aproximadamente 4-5 minutos por lado.
- Sirve inmediatamente con tu salsa favorita.
Boneless de pollo con totopos
Los totopos son una fritura tradicional mexicana hecha con tortillas de maíz fritas. Son crujientes y sabrosos, y combinan muy bien con el pollo.
Ingredientes:
- 500 gramos de pechuga de pollo, cortada en trozos pequeños
- 1 taza de harina de trigo
- 1 huevo, batido
- 1 taza de totopos molidos
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
- Corta la pechuga de pollo en trozos pequeños.
- En un recipiente, mezcla la harina de trigo, la sal y la pimienta.
- En otro recipiente, bate el huevo.
- En un tercer recipiente, coloca los totopos molidos.
- Pasa los trozos de pollo por la harina, luego por el huevo y finalmente por los totopos molidos.
- Calienta suficiente aceite en una sartén a fuego medio-alto.
- Fríe los boneless en lotes hasta que estén dorados y cocidos por dentro, aproximadamente 4-5 minutos por lado.
- Sirve inmediatamente con tu salsa favorita.
Para que los boneless queden más crujientes, puedes pasarlos por el congelador durante 30 minutos antes de freírlos.
Puedes agregar otros ingredientes a la mezcla de pan rallado, como queso parmesano, orégano, ajo en polvo o chile en polvo.
Puedes servir los boneless con diferentes salsas, como salsa búfalo, salsa ranch o salsa de tomate.
¿Qué son los boneless naturales?
Los boneless naturales son trozos de pechuga de pollo sin hueso que se empanizan y se fríen. Se llaman “naturales” porque no llevan ningún tipo de aditivos ni conservantes.
Los boneless naturales son un platillo popular en México y en otros países de América Latina. Son una opción saludable y nutritiva, ya que el pollo es una carne magra que aporta proteínas, hierro y otros nutrientes esenciales.
¿Dónde se originaron los boneless?
Los boneless se originaron en Estados Unidos, específicamente en la ciudad de Nueva York. En la década de 1970, un restaurante llamado Anchor Bar comenzó a servir alitas de pollo fritas con salsa búfalo. Las alitas de pollo se hicieron rápidamente populares y, con el tiempo, se fueron diversificando en diferentes tipos de presentaciones, incluyendo los boneless.
Los boneless llegaron a México en la década de 1990 y rápidamente se convirtieron en un platillo popular. Hoy en día, se pueden encontrar boneless en restaurantes, bares y tiendas de autoservicio en todo el país.