La pasta es uno de los platillos emblemáticos de la comida italiana, aunque tiene preparaciones tradicionales esta receta es muy versátil, ya que se puede hacer con diversos ingredientes. A continuación te dejamos 10 ideas para que prepares pasta en este Día Internacional de la Cocina Italiana.
10 platillos con pasta, la comida italiana por excelencia
La comida italiana tiene influencia de las cocinas de la antigua Grecia, la antigua Roma y la culinaria árabe.
El descubrimiento de América trajo nuevos ingredientes a la cocina italiana, como la patata y el tomate, que se convirtieron en la base de muchos platos típicos.
La comida italiana se caracteriza por el uso de productos locales y de temporada, como el aceite de oliva, el arroz, la pasta, el queso, las legumbres, las frutas y las verduras. Se divide en tres grandes zonas: el norte, el centro y el sur, cada una con sus propios platos, ingredientes y tradiciones.
En el norte se consumen más pasta cocida, sopas, carnes hervidas, vino y mantequilla. Algunos platos famosos son el carpaccio, el
y la polenta.
En el centro se emplean más aceite, embutidos, carnes variadas y hierbas aromáticas. Algunos platos conocidos son la lasaña, la bistecca y la pizza al taglio.
En el sur se prefieren los platos sencillos, con tomate, pescado, queso y alcaparras. Algunos platos populares son la pizza, los spaghetti, los maccheroni y la caponata.
La comida italiana también tiene una gran variedad de postres, como el tiramisú, el gelato, el cannolo, la panna cotta y el panettone.
¿Cuál es la típica pasta de la comida italiana?
La pasta es uno de los alimentos más representativos de la comida italiana. Hay muchos tipos de pasta, con diferentes formas, tamaños y sabores.
Espagueti: son tiras largas y delgadas, de sección circular. Se pueden combinar con muchas salsas, como la boloñesa, la carbonara o la puttanesca.
Tallarines: son similares a los espaguetis, pero de sección plana y más anchos. También se pueden acompañar con diversas salsas, como la boloñesa, la carbonara o la de setas.
Penne: son tubos cortos y diagonales, con estrías en la superficie. Se suelen preparar con salsas espesas, como la amatriciana, la arrabbiata o la de queso.
Farfalle: son piezas con forma de lazo o mariposa. Se pueden comer con salsas ligeras, como la de pesto, la de tomate o la de verduras.
Fusilli: son espirales cortas y enrolladas. Se adaptan bien a todo tipo de salsas, como la boloñesa, la carbonara o la de atún.