El caldo de pollo con verduras es tan benéfico como delicioso, debido a que proporciona nutrientes clave como proteínas, vitaminas y minerales. Además, es fácil de digerir, ayuda a la hidratación y ofrece alivio en situaciones de resfriados o problemas digestivos.
Otra de sus propiedades es que es una importante fuente de aminoácidos, esenciales para la reparación y construcción de los tejidos del cuerpo; también fortalece el sistema inmunológico y brinda quercetina, que ayuda contra la inflamación.
Aunque parece fácil preparar un caldo de pollo, en realidad, hay una serie de pasos secretos que se deben llevar para que salga perfecto.
- Paso 1.
Lavar el pollo. Aunque hay quienes aseguran que no es necesario, lo real, es que el pollo tiene impurezas que se deben eliminar antes de cocinarlo, como baba, exceso de grasa y otros restos del ave. Una vez limpio, se reserva. Además de las clásicas piezas como la pechuga, las piernas y muslos, el primer secreto, para que el caldo salga más rico y lleno de propiedades, debe llevar huesitos de retazo, como huacal, alitas y rabadilla.
- Paso 2.
A una olla se le vacía suficiente agua limpia con dos dientes de ajo y un cuarto de cebolla, y se pone a la estufa al un fuego medio-alto.
- Paso 3.
El segundo secreto de la receta es que el pollo solo se debe agregar a la olla hasta que el agua está verdaderamente caliente, de lo contrario, el caldo saldrá opaco. Cuando se agregó la carne, se baja el fuego a medio-bajo y se deja cocer.
- Paso 4.
Cuando el pollo comienza a soltar su sabor es importante estar pendiente, este es el tercer secreto, ya que comenzará a sacar espuma propia de la carne y se debe retirar con una cuchara. Así hasta que el caldo siga medio hirviendo.
- Paso 5.
Cuando el caldo ha dejado de sacar espuma y el pollo está medio cocido, se agregan las verduras limpias y picadas en cuadritos. Pueden ser: zanahorias, papas, chayote, apio y calabacitas.
- Paso 6.
Con todo incorporado es hora de sazonar con sal, y se le pone hasta este momento para que no opaque el caldo y el sabor sea más preciso, es el cuarto secreto. También se agregan unas ramitas de cilantro y si hay, de hierbabuena. El sabor es mágico.
- Paso 7.
Ajustar el sazón y cuando la carne esté totalmente cocina, con las verduras, se apaga el fuego. Al servir, se puede acompañar con cebolla, chilito serrano y cuadritos de aguacate. También queda bien unas gotitas de limón. Disfruta de un rico caldo de pollo. Provecho.