Ingredientes
- 2 ¼ de harina
- ¾ cda. de canela
- 2 cdas. de jengibre
- 1 cda. de polvo para hornear
- ½ cda. de clavo de olor
- ¼ cda. de sal
- 1 huevo
- 1 taza de azúcar
- ¼ taza de melaza
- 1 cda. de agua
- 2 cdas. de azúcar (aparte)
- Gomitas, chispas o lunetas para decorar
- 1 taza de azúcar glass (para el glaseado)
- 1 cda. de jugo de limón
- Colorante vegetal varios colores
Preparación
- Precalienta el horno a 175° C. Mientras, cierne la harina, el polvo para hornear, el clavo, la canela, el jengibre y la sal.
- Acrema la mantequilla con la taza de azúcar en un bowl hasta que esponje. Agrega el huevo, el alua y la melaza.
- De forma gradual, vacía, los ingredientes secos ya cernidos en la mezcla anterior, hasta que se forme una masa. Refrigérala durante media hora.
- Extiende la masa con un rodillo y córtala con un cortado en forma de muñeco de jengibre. Pásalas por las 2 cucharadas de azúcar.
- Para el glaseado, bate el azúcar y el limón hasta formar una pasta. Agrega el colorante de tu elección.
- Coloca con cuidado las galletas en una charola, engrasada previamente. Hornea a 180° C, de 8 a 10 minutos, y deja enfriar por 5 minutos. Decora con el glaseado y las gomitas.
Las galletas en forma de muñeco de jengibre sin un clásico de la temporada navideña. Hoy te invitamos a prepararlas y a conocer su origen. ¡Te encantará su historia! No te pierdas: No vas a creer lo que sucede cuando comes jengibre todos los días
Historia del muñeco de jengibre
La historia de estas galletas y la tradición de prepararlas proviene de un cuento llamado “El hombre de nieve”, que te compartimos a continuación: Hubo una vez una viejecita que vivía en una casita muy vieja en la cima de una montaña. A la viejita le encantaba hornear y, una Navidad, decidió hacer un hombre de jengibre. Moldeó la harina con la figura y además le agregó pasas para formar la boca, los ojos y una pequeña fila en su pecho como botones para su chaqueta. Lo colocó en el horno y poco a poco su casa se llenó del dulce olor de las especias. Ya crujiente, la viejita sacó al hombre de jengibre. ¡Pero cuál fue su sorpresa que la galleta saltó de la bandeja y salió corriendo gritando: ¡Corre, corre, tan pronto como puedas! No puedes alcanzarme. ¡Soy el hombre de jengibre! Te puede interesar: Ponche de frutas navideño: conoce su historia y beneficios La viejita corrió tanto como pudo, sin alcanzarlo. El hombrecillo se encontró con un pato que también intentó alcanzarlo, sin éxito. Luego se encontró con un cerdo, que también intentó alcanzarlo para comerlo, y tampoco lo consiguió. Más adelante, un cordero quiso atraparlo, pero el hombre de jengibre era más veloz que todos. La galleta, de pronto, se encontró con un río. Miró hacia atrás y vio a todos los que lo perseguían: la vieja, el pato, el cerdo y el cordero. El hombre de jengibre se carcajeó y continuó su huida hacia el río. En la orilla encontró a un zorro muy astuto que le dijo “hombre de jengibre, soy tu amigo y te ayudaré a cruzar el río, Sube a mi lomo”. Al ver a sus perseguidores acercarse, la galleta aceptó subirse pero, se acercó tanto al hocico del zorro, que este se lo comió de una sola mordida. La viejita regresó a su casa y, en lugar de un hombrecillo, decidió hacer una casita de jengibre. ¡Muy feliz Navidad! No te quedes con el antojo y prepara para ti estas recetas de galletas de Navidad, súper deliciosas y muy fáciles. Sigue en COCINA FÁCIL y disfruta de más ricos y originales sabores de esta temporada
