¿Qué sería de la Navidad sin el tradicional pavo?
La tradición del pavo navideño está bien establecida en muchos países del mundo y es un placer encontrarlo en la mesa todos los años. Acompañado de castañas, muchas veces, el pavo de Navidad, por lo general se prepara relleno, lo que le da aún más sabor. Pero el tamaño de un pavo es suficiente para alimentar a una familia completa y más si se sirven otros platillos, así que, por lo general, queda una buena reserva que estaremos comiendo los días siguientes a la Navidad. En primer lugar, puedes guardar el pavo cocido sobrante durante 3 a 4 días en el refrigerador. Pero también puedes congelarlo en porciones o preparar nuevos platos con las sobras. Sobraron algunas escalopas de pavo? Fríelas en la sartén para hacer un buen risotto de guisantes o una lasaña rápida. Combínalo con verduras pequeñas como zanahorias y maíz para hacer deliciosas croquetas que harán las delicias de grandes y pequeños. Prepara una sopa de berros y sírvela con brochetas de pavo para una comida ligera. Piensa también algo original, como una bonita ensalada de pavo y pepino para servir en un frasco. Cocina una salsa de curry con pasta y trozos de pavo. Apuesta por las sopas de verduras, en las que puedes poner pavo en pequeños trozos. Escápate a Asia con un wok de fideos, pavo y verduras. En fin… Es por eso que compartimos algunas recetas para sacarle el mejor partido a esas deliciosas sobras de pavo. ¡No te aburrirás de él y tu familia quedará fascinada!
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