Los huevos estrellados son de nuestros favoritos para desayunar en familia. Pero, ¿sabías que existen muchas formas de prepararlos? Al ser uno de los desayunos más tradicionales, la inventiva culinaria mexicana y también internacional, ha hecho de los huevos estrellados una gran diversidad de platillos deliciosos y muy fáciles de preparar. Hoy te compartimos 23 recetas para que las prepares en el desayuno, y que sin duda te ayudarán a empezar tu día de buen humor y de forma deliciosa.
Cómo hacer huevos estrellados a la perfección
Siempre hay una primera vez y es muy normal que el huevo estrellado decidamos hacerlo revuelto, especialmente porque la yema se rompe. Pero hoy te vamos a dar unos buenos tips con los que no habrá falla y tendrás un huevo estrellado perfecto, redondito y delicioso:
Elige un buen sartén
Este es el principio básico para que tu huevo se forme pequeño. Debe estar en buen estado, es decir, sin el teflón desgastado. También puedes usar un sartén de acero inoxidable con una cantidad de grasa adecuada, que abarque toda su superficie. Te recomendamos usar un sartén pequeño, así será más fácil que se forme el huevo y además usarás menos aceite en su preparación.
Romper el cascarón
No es necesario que hagas un gran agujero. Basta que pegues 3 ocasiones en un filo, acerques el huevo a la sartén y, de forma delicada, lo abras y dejes caer. Te interesa: Otras maneras de cocinar huevo que debes probar
Ojo con la yema
Para evitar que la yema se rompa, deja caer el huevo en el sartén a poca altura, y de forma lenta. No le temas al chispoteo del aceite. De hecho, es más probable que te quemes si dejas caer el huevo desde lo alto.
Huevos estrellados volteados
Si deseas que tu huevo tenga la yema cocida, debes tener más cuidado. AL momento de voltearlo, debe ser con mucha delicadeza para evitar romperlo. Te puede interesar: 6 formas de cocinar huevos a la mexicana para el desayuno
Baja el fuego
Si ves que las orillas están muy doradas, te recomendamos que bajes el nivel del fuego para que se mantengan tanto la clara como la yema con la textura ideal y evitar que se cocinen de más.