Cómo hacer caldo de huesos: una receta tradicional, fuente de proteína y colágeno
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Tiempo:6:00
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Porciones:8
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Dificultad:Media
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Tipo:
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Cocina:
Ingredientes
- Kilo y medio de huesos de res, pollo o pescado (puedes usar una combinación de huesos para mayor sabor)
- 2 zanahorias grandes, peladas y cortadas en trozos grandes
- 2 tallos de apio, cortados en trozos grandes
- 1 cebolla grande, pelada y cortada en cuartos
- 4 dientes de ajo, machacados
- 2 hojas de laurel
- 1 cucharada de granos de pimienta negra enteros
- Sal marina al gusto
- Agua suficiente para cubrir los ingredientes en la olla
Preparación
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Preparación de los ingredientes:
- Si los huesos no están asados, puedes hacerlo colocándolos en una bandeja para hornear y horneándolos a 200°C (400°F) durante 30-40 minutos, o hasta que estén dorados.
- En una olla grande, coloca los huesos asados junto con las zanahorias, el apio, la cebolla, el ajo, las hojas de laurel y los granos de pimienta.
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Cocción lenta:
- Cubre los ingredientes con agua fría. Asegúrate de que el agua cubra completamente los huesos y las verduras.
- Lleva la olla a ebullición a fuego alto, luego reduce el fuego a bajo para mantener un hervor suave.
- Cocina el caldo a fuego lento durante al menos 6 horas, pero idealmente de 12 a 24 horas para obtener un caldo más concentrado y lleno de sabor. Durante la cocción, puedes ir retirando la espuma y la grasa que se acumule en la superficie.
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Colar y refrigerar:
- Una vez que el caldo esté listo, retira los huesos y las verduras con una espumadera y desecha.
- Pasa el caldo por un colador fino o un paño de cocina limpio para eliminar cualquier resto sólido.
- Deja enfriar el caldo a temperatura ambiente y luego refrigéralo. Una vez enfriado, la grasa se solidificará en la parte superior y podrás quitarla fácilmente con una cuchara.
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¡Disfruta y almacena!:
- Utiliza el caldo de huesos como base para sopas, guisos, salsas o bébalo solo como un tónico reconfortante.
- El caldo de huesos se puede almacenar en el refrigerador por hasta una semana, o en el congelador por varios meses. Para descongelarlo, simplemente colócalo en el refrigerador durante la noche o caliéntalo suavemente en una olla a fuego bajo.
El caldo de huesos es una antigua receta que ha sido transmitida de generación en generación debido a sus increíbles beneficios para la salud.
Este caldo, hecho con huesos de res, pollo o pescado, es una rica fuente de proteínas, minerales y colágeno, que fortalecen nuestros huesos, articulaciones, cabello y uñas. Además, es una deliciosa base para sopas, guisos y otras recetas.
El colágeno es una proteína esencial que se encuentra en nuestros huesos, piel, cartílagos y tendones, brindándoles resistencia y elasticidad. A medida que envejecemos, la producción de colágeno disminuye, lo que puede provocar arrugas, debilitamiento óseo y rigidez articular.
Consumir alimentos ricos en colágeno, como el caldo de huesos, puede ayudar a compensar esta pérdida y mantener la salud de nuestras estructuras corporales.