Disfruta el regreso a casa con una rica bebida fría. Aquí te dejamos la receta para hacer un licuado de café y fresa que estamos seguros que te encantará.
Ingredientes
- 4 fresas
- 500 mililitros de leche
- 2 cucharadas de café soluble
- 3 cucharadas de helado de fresa
- 1 cucharada de jarabe de granadina
- Hielo
- Jarabe de chocolate
Preparación
- En un vaso de licuadora, agrega leche, jarabe de granadina, helado de fresa y café soluble. Licúa todos los ingredientes hasta que formen un líquido espeso.
- Añade hielos y licúalos hasta que se integren por completo a la preparación.
- Baña el interior de un vaso con jarabe de chocolate.
- Sirve en el vaso.
- Decora con una fresa, haciéndole un corte por la mitad e incrustándola levemente en el borde del vaso.
- ¡Disfruta!
Esta es la receta más fácil y rápida para hacer un licuado de café y fresa, una delicia perfecta para cerrar tu jornada.
Los licuados son una bebida perfecta para cualquier ocasión. Ya sea para llenarte de energía en el inicio del día, recargar pilas a la mitad de tu jornada o simplemente consentir a tu paladar con algo fresco y saludbale, los batidos –o smoothies– siempre estarán allí. Si quieres comprobar lo que lees, te invitamos a hacer un rico licuado de café y fresa, que podría ser un gran acompañante para relajarte en casa después de un día largo en la escuela o el trabajo. El helado y el jarabe le darán el toque perfecto para sellar este regalo de sabores.
5 tips para hacer licuado de café y fresa
- Sustituye el café soluble por granos de café. En lugar de emplear café soluble (el que venden en bolsita en tiendas), puedes utilizar auténticos granos de café en la preparación de este batido. Solo tienes que molerlos hasta que queden como un polvo fino, después los agregas con un poco de azúcar a un vaso de licuadora –o incluso shaker– con hielos y leche.
- Recicla el café que se quedó en la cafetera. Si te hiciste un café en la mañana y no te lo terminaste, puedes utilizarlo para la preparación de este licuado. Esto permitirá que la preparación quede fría en menos tiempo de lo indicado. Eso sí, cuida que el café todavía esté bebible, de lo contrario podrías agriar esta delicia dulce.
- Cuida la consistencia de tu licuado. Si el licuado de café y fresa quedó muy espeso, te recomendamos agregar un poco más de leche. Si, en el caso contrario, le falta consistencia puedes agitar durante más tiempo o añadir un poco más de hielos.
- No agregues endulzantes a la preparación. Dicen por ahí que no hay peor ofensa para el café que añadirle azúcar. Si bien no queremos ser unos puristas de esta bebida, en el caso del licuado de café y fresa, los sabores se benefician por completo con la ausencia de azúcar o cualquier tipo de endulzante. Con las cantidades contenidas en la granadina, el helado y el jarabe con el que decoras el vaso es suficiente.
- Juega con los sabores. Aunque nuestra receta contempla solo ciertos ingredientes, te recomendamos no limitarte y añadirle todo tipo de ingredientes extra al batido, como chocolate o cacao en polvo, extracto de vainilla, canela o crema batida.
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