La comida española es muy famosa mundialmente, ya que algunos de sus platillos se han vuelto realmente populares y de los más replicados fuera del país; su gastronomía es muy extensa, variada y sabrosa, ya que rescata distintos sabores en cada uno de sus platillos que lograrán marcar la diferencia entre uno y otro, así que nunca te aburrirás de la comida de este lugar.
Para que brinques del otro lado del charco de forma diferente y sin tener que gastar mucho para adentrarte a este bello país, te presentamos algunos de los platillos típicos de España que deberás probar cuando tengas la oportunidad de ir o, en cualquier restaurante de comida española, para que vayas expandiendo tus conocimientos culinarios.
Aunque no lo creas, también es posible conocer el mundo a través de su comida y qué mejor que conocer un país europeo con sus platillos típicos.
Paella
Este es uno de los platillos típicos de España más internacional que existe, ya que es bien conocido y realizado por todo el mundo, pero nada se compara con el hecho en casa. Su nombre proviene del tipo de sartén que se utiliza para cocinarlo, el cual, originalmente, era arroz combinado con todo lo que se tuviera a la mano, ingredientes que podían ser conejo, pollo, judías verdes, judías blancas, caracoles y todo tipo de verduras que se tuvieran al alcance. Hoy en día existen diferentes tipos de paella que son combinados con diferentes ingredientes, entre los que encontramos sofrito de cebolla, pimiento verde,tomate con calamares, chirlas, mejillones, pollo, gambas y cigalas.
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Cocido madrileño
Este platillo es considerado uno de los principales atractivos de Madrid, el cual, originalmente, era destinado a aquellas personas pertenecientes a las clases más bajas como obreros y agricultores. Este platillo consta en dos tiempos, en el primero se puede escoger entre sopa de fideos o el caldo resultante de cocer los garbanzos con verdura y para el segundo se puede escoger generalmente entre repollo o judías verdes, pollo o gallina, morcillo, tocino, chorizo y morcilla.
Gazpacho y salmorejo
El gazpacho es una sopa fría de pan majado, agua, aceite de oliva, vinagre, tomate, pepino, cebolla, ajo y pimiento verde, ideal para el verano ya que es súper refrescante; tal vez en primera instancia, al leer todo lo que contiene, no suene precisamente lo más antojable del mundo, pero cuando estás conociendo gastronomía de otros lugares lo mejor es no cerrarte a nada y simplemente probar. Existe una sopa similar al gazpacho llamada salmorejo, sólo que estas suele ser más espesa y sencilla en cuanto a ingredientes, esta sólo requiere de pan remojado, ajo, tomate, aceite, vinagre y sal, se sirve con trozos de jamón serrano y huevo cocido.
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Pulpo a la gallega
Aunque se vea súper complejo, este es un platillo realmente sencillo, pero exageradamente delicioso; para ser preparado no necesitas más que una olla con agua hirviendo donde tendrás que sumergir el pulpo durante unos segundos y retirarlo, procedimiento que tendrá que ser repetido de tres a cuatro veces, de esta forma el animal marino se ablandará y conservará su piel. Para degustar, el pulpo es cortado en rodajas sobre una tabla de madera bañado un poco con aceite de oliva, sal, pimientón dulce espolvoreado.
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Rabo de toro
Tal vez con saber el nombre no se antoje, pero se ha convertido en uno de los platillos típicos de España más deliciosos que hay y sí, tal cual lo lees, se necesita del rabo del toro para realizarse. Es básicamente un estofado de cola de toro con cebolla, zanahorias, tomate, ajos, laurel, azafrán, aceite de oliva, vino tinto, pimienta y sal al gusto y, para la sorpresa de muchos, esta carne es realmente exquisita y súper tierna. ¡No te arrepentirás de probarlo!
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