Ingredientes
- 400 gram ravioles rellenos de queso y espinaca
- 2 cucharadas de mostaza Dijon a la antigua
- 0.5 taza de vino blanco
- 1 diente de ajo picado
- 2 tazas de arúgula
- 2 cucharadas de mantequilla
- 0.5 taza de queso parmesano
- 1 cucharada de vinagre balsámico
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharada de jugo de limón
Preparación
- Cuece los ravioles en agua hirviendo con sal de acuerdo con las indicaciones del paquete.
- Derrite la mantequilla y sofríe el ajo hasta que dore ligeramente. Añade el vino y reduce a la mitad de su volumen. Integra la mostaza, combina y rellena los ravioles.
- Incorpora la arúgula con el aceite de oliva, el balsámico, el limón y el parmesano. Sirve sobre los ravioles.
Disfruta de una comida italiana tradicional con esta receta de ravioles con parmesano y arúgula, son perfectos para el verano.
Historia de los ravioles
La palabra raviolli hace referencia a todo tipo de pasta rellena que comúnmente se prepara en forma cuadrada. Los ravioles son una pasta delgada que envuelve a un relleno y que después de hierven y se sirven con una salsa o caldo. Los rellenos son tan diferentes que van desde la ricotta, verduras hasta carnes y varían según la región.
En cuanto a su origen no se conoce una versión exacta, pero la más popular es la que sugiere que llegaron a Italia gracias a Marco Polo, quién se inspiró en los ravioli chinos conocidos como jiaozi o los wontón, las cuales son un también a base de una masa fina rellena en forma de un pequeño costal, así pues se adaptó esta preparación a la pasta italiana tradicional.
Sea cual sea la verdad, no cabe duda que los ravioles son un representante delicioso de la gastronomía Italiana y que son perfectos para consentir todos los paladares.
Tip: Se sabe que los ravioles están listos cuando empiezan a flotar en el agua de cocción.
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