¡Picosito y delicioso!
Carne, chile, huevo, frijol, queso añejo, higo, chabacano, manzana, pera… el origen de la gastronomía duranguense se remonta a la época prehispánica cuando diversos pueblos como los huicholes, tarahumaras y tepehuanes subsistían por medio de la caza y recolección de plantas y animales.
Tiempo después, la tradición culinaria de estos pueblos se mezcló con las técnicas e ingredientes que llegaron de Europa con la colonización, dando como resultado una gran variedad de recetas, platillos y preparaciones llenas de sabor, cultura, historia y tradición.
Uno de éstos es el tradicional Venorio de Durango (también llamado Venorio de Tepehuanes), un platillo hecho a base de semillas y venas de chile ancho o colorado que te recordará en cada bocado su origen ancestral.
¿Te animas a probar esta delicia del desierto? Entonces ¡manos a la obra! Esto es todo lo que necesitas para prepararlo:
Ingredientes:
- 1 kilo de costilla de cerdo
- 4 cucharadas de aceite
- 200 g de venas y semillas de chile
- 1 diente de ajo
- 1 cucharadita de comino
- 4 tazas de agua
- ½ taza de masa de maíz
- 4 cucharadas de cilantro picado
Procedimiento:
- Fríe la venas de chile, cuela, escurre y reserva el aceite en una olla, dora las costillas en el mismo.
- Licúa las venas de chile, ajo y comino con 2 tazas de agua, sal y pimienta, vierte la salsa sobre las costillas.
- Licúa la masa de maíz con 2 tazas de agua, vierte la mezcla para espesar la salsa y cuece durante 30 minutos o hasta que las costillas estén suaves y sirve.
Prepararlo no te tomará más de una hora, y cuando lo pruebes te darás cuenta de lo exquisita que es la comida norteña. Comparte esta receta y Viajemos por México para conocer los rincones más sabrosos del país.
¡Buen provecho!