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La carne de cerdo ha sido parte del consumo humano desde hace siglos, gracias a su sabor y también a que representa una comida completa y sustanciosa. En los últimos años muchas personas han reducido o eliminado su consumo por pensar que no es buena para la salud, sin embargo es totalmente falso ya que además de ser un buen alimento para una dieta equilibrada, todo depende de la producción y la forma en la que es preparada.
Para elegir correctamente la carne de cerdo, lo primero que debes revisar es que tenga un sello o certificado de calidad, en México se conoce como sello Tif, es otrogado por SAGARPA y te asegura que esa carne paso por un proceso adecuado de producción y almacenamiento, es decir que no tiene ningún contaminante. Además del sello hay que revisar el color, debe ser entre rosado o rojo pálido, según el corte, pero sobre todo debe estar luminosa y no tener un aspecto seco.
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La carne de cerdo siempre debe estar bien cocida.
Lo que no sabías de la carne de cerdo
- Los cortes de la zona interna como lomo, espaldilla y pierna,aportan grasas saludables como mono y poliinsaturadas.
- El lomo es uno de los mejores cortes que incluso aporta menos grasa que el pollo.
- Aporta grandes cantidades de proteína y nutrientes como Vitamina B, hierro, fósforo, potasio y zinc.
- No es una carne blanca, se considera como roja.
- No se necesita tanta grasa o aceite para cocinarla, al ser una carne suave.
- Es ideal para las personas que buscan perder peso y ganar masa muscular.
- Su colesterol no es malo, pues no afecta los niveles en la sangre.
- Es falso que toda la carne de cerdo provoca cisticercosis, está infección suele presentarse con carne de mala calidad, cuando se cocina en condiciones poco higiénicas o se consume cruda.
7 Consejos para cocinar correctamente carne de cerdo
- En primer lugar, utiliza limón o vinagre para marinarla o cocinarla, su aciez la limpia mejor.
- Precalienta la sartén o el horno antes de cocinarla, esto te ayudará a que tenga una cocción dorada por fuera y jugosa por dentro.
- Además, nunca la dejes cruda o semi cocida, lo ideal es que esté dorada por fuera y suave por dentro.
- No la dejes por mucho tiempo fuera del refrigerador y no la vuelvas a congelar.
- Tambipen, si vas a freír, hazlo a fuego medio.
- Para descongelarla puedes sumergirla en agua fría o pasarla del congelador a la parte inferior del refrigerador, nunca la pongas al sol.
- Finalmente, cocina y consume la carne de cerdo, máximo 3 días después de comprarla.
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