El sabor y la creatividad son armas fundamentales para que los niños coman todo tipo de alimentos nutritivos. Estas 15 recetas de verduras para niños son perfectas pues combinan un delicioso sabor y además son muy divertidas.
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Tips para incluir verduras en la dieta de tu hijo
Hazlo divertido
¿Qué tal probar una pizza de vegetales? ¿O un sándwich usando diversas verduras como las tapas del pan? Coloca las verduras en tus recetas donde menos lo pensabas. Estará comiendo más sin notarlo al incluirla en tus platillos.
Quítale la presión
Recuerda que comer verduras satisface más que otras comidas. Deja que tus niños las consuman a su ritmo, ¡no los atiborres! Colabora comiendo también muchas frutas y verduras para que se le haga natural verlas en casa y se les antojen.
Un snack disponible
Haz el hábito en casa con el propósito de que a cualquier hora tus hijos puedan hallar verduras en el refri. Así que mantén un recipiente con varias secciones lleno de zanahorias crudas, jitomates cherry, pepinos en bastones o lo que se les antoje.
También puede ser un poco de fruta: algo que se encuentre listo al momento de que tengan hambre.
Envuévelas
Una manera fácil de comer verduras es en wraps. Las puedes enviar a tus pequeños en su refrigerio del día y son una excelente opción para cualquier hora. Incorpora un poco de jamón, queso o la proteína que quieras y prueba diversas combinaciones con el propósito de volverlas las favoritas de tus hijos.
Otra forma es mezclar las albóndigas de carne o pollo con verduras ralladas (zanahoria o calabaza). Esto le dará un toque especial a la preparación y aumentará el aporte de nutrimentos.
Escóndelas
Por ejemplo: prueba cambiar las papas fritas por camotes o zanahorias horneadas, prepara fideos de calabacita ( hazlos con un espiralizador) como si fuera una pasta normal o agrega algunas hojas de espinaca fresca a su licuado matutino. No se notan en sabor, pero sí en sus beneficios.
Sírvelas en jugos
Un jugo de zanahoria con betabel tiene un color atractivo y es tan dulce que ambas verduras esconden su sabor de esta forma. Busca combinaciones atractivas, como melón con pepino y kiwi, para que la fruta sea una explosión de gusto.
Prueba otros métodos de cocción
Algunas verduras, más que por su sabor, pueden no ser las preferidas por la textura. No dejes de servirla (ni a ti ni a tus hijos), solo prueba otra presentación. A continuación te damos algunas sugerencias:
- Coliflor: rostízala o saltéala con especias. Le dará un sabor a nueces muy atractivo.
- Col o repollo: córtala en juliana y saltéala con un poco de vinagre de manzana.
- Espinacas: incluye unas hojas en el licuado y, si la sirves en ensalada, añade frutas o ajonjolí garapiñado.
- Betabel: después de pelarlo, prepáralo con papas al horno o en chips.
