El farro es un grano que se ha cultivado desde la antigüedad. Éste se parece al arroz integral y está repleto de nutrientes esenciales para el cuerpo, por lo cual es ideal para mantenerte saludable por muchos años más años. Aquí te contamos por qué te conviene incluirlo en tus platillos.
Se trata de un alimento muy popular en países como Italia y España, pues es un cereal muy saludable por lo que también ha ido ganando terreno en Estados Unidos y México, ya que está repleto de beneficios para la salud y es muy versátil.
Qué es el farro y cuáles son sus beneficios
Suele ser un ingrediente frecuente en la cocina mediterránea, su sabor es parecido al de la nuez y su consistencia es similar al arroz. Según los expertos de Mayo Clinic, el farro es una gran fuente de fibra, hierro, proteínas y magnesio.
Con todos esos nutrientes en este pequeño pero poderoso grano, puede generar muchos beneficios para la salud como la prevención de la diabetes, el bienestar del corazón y la salud del cerebro.
Por otro lado, el farro también contiene antioxidantes como polifenoles , carotenoides, fitoesteroles y selenio. Los antioxidantes ayudan a prevenir el daño celular en el cuerpo. Las investigaciones han descubierto que consumir antioxidantes puede reducir el riesgo de enfermedades crónicas.
De igual manera que otros cereales, el farro ayuda a que te mantengas satisfecho por más tiempo, por lo que es ideal para evitar comer golosinas entre de cada comida.
Una porción de farro aporta alrededor de 200 calorías, 7 gramos de proteína y 7 gramos de fibra, se recomienda que se cocine en la estufa una olla de cocción lenta o en el horno.
Toma en cuenta que no suele expandirse tanto como el arroz o las pastas, es ideal para incorporarse a sopas, guisos y ensaladas.