El pozole es uno de los platillos más nutritivos, amados y antiguos de México. Su nombre tiene raíces en el náhuatl, pozolli, cuyo significado es “hervido” o “espumoso”, haciendo referencia a su proceso de preparación.
Este platillo se prepara con maíz cacahuazintle, conocido por sus granos grandes que, al hervir, se abren como si fueran flores blancas, una característica tan distintiva que los mexicas lo consideraban un símbolo de transformación.
En tiempos antiguos, los mexicas cocinaban el pozole para ceremonias religiosas y utilizaban carne humana para hacer el guiso. Al tlatoani le ofrecían la mejor parte del cuerpo como muestra de agradecimiento y respeto. Sin embargo, con la llegada de los españoles, la receta sufrió una transformación significativa: la carne de cerdo reemplazó a la carne humana, adaptando el platillo a nuevas costumbres.
Aquí te vamos a dar dos maneras de disfrutar el pozole con flor de calabaza: una es con la carne, por si únicamente prefieres comer más vegetales, y una versión totalmente vegetariana.
Pozole con flor de calabaza
Ingredientes:
- 500 gramos de maíz cacahuazintle (maíz para pozole)
- 1 pechuga de pollo y retazo para que le dé más sabor
- 1 cebolla blanca grande, dividida en dos partes
- 1 cabeza de ajo sin pelar
- 2 dientes de ajo pelados
- 5 hojas de laurel
- Sal al gusto
- 2 manojos grandes de flor de calabaza, lavadas y picadas
- 4 chiles poblanos asados y en rajas
- Sal al gusto
- Orégano seco
- Lechuga, rábanos, cebolla picada, limones y tostadas para acompañar
- Agua suficiente para cocinar el maíz
Instrucciones:
- En una olla grande con suficiente agua limpia se coloca el maíz cacahuazintle, se le agrega la mitad de la cebolla y la cabeza de ajo completa, sin pelar. También se agrega la pechuga de pollo y los huesitos, que le dará más sabor al pozole y aportará más beneficios nutricionales. Todo se cocina a fuego medio hasta que comience a hervir y el maíz reviente y esté suave. Este procedimiento puede tomar aproximadamente de 2 a 3 horas, si se hace en la estufa o en un anafre.
- Mientras el maíz y la carne se cocinan, se prepara el resto de los ingredientes. En una sartén grande, se le pone un poco de aceite y se saltea la otra mitad de la cebolla picada, dos dientes de ajo picados y las rajas de chile poblano. Se sazona con un poco de sal y se cocinan por unos minutos.
- Luego, se agrega la flor de calabaza a la sartén con los chiles, la cebolla y los dientes de ajo. Se saltea un poco más hasta que la flor esté cocida pero aún crujiente. Reserva.
- Cuando el maíz está más suave y la carne cocida, se agregan las verduras salteadas a la olla del pozole. Si se antoja, se pueden utilizar algunas ramas de epazote para condimentar durante 15 minutos a fuego medio.
- La pechuga del pollo se saca de la olla y se desmenuza para que cuando el pozole se sirva en platos profundos, se agreguen las porciones precisas de carne. Ajustar la sal.
- El pozole se sirve caliente y se acompaña con jugo de limón, un poco de orégano, lechuga en tiritas, rábanos en rodajas y cebolla picada.
En caso de que se prefiera la versión totalmente vegetariana:
El procedimiento es similar, solo que a la olla del maíz pozolero no se le pone ningún tipo de carne. El cacahuazintle se cuece únicamente con la cabeza de ajo, la cebolla, las hojas de laurel y se sazona con sal.
Por otro lado, se lava la flor de calabaza y se pica en trozos pequeños. Los chiles poblanos se asan y se cortan en rajas. Estas verduras se agregan al caldo del pozole hasta que el maíz esté casi suave, de lo contrario, se corre el riesgo de que hiervan mucho y se despedacen. También puede llevar champiñones picados.
Cuando todos los ingredientes están incorporados, se le puede poner un poco de orégano y se retira del fuego cuando el cacahuazintle esté listo para comer.