Sabemos que la comida chatarra es mala de por sí para la salud, sin importar nuestra edad. Sin embargo, sus efectos son más nocivos en los niños, ¡más de lo que te puedas imaginar! Y eso no es todo: ellos son los principales consumidores de este tipo de alimentos.
Te explicamos cuáles son estos efectos nocivos, y por qué en el país ya se están tomando medidas para que los niños y adolescentes eviten su consumo.
Los niños y la comida chatarra: una peligrosa relación
Seguramente ya habías escuchado que esta comida es peligrosa debido a que provoca sobrepeso y obesidad. Pero los riesgos van mucho más allá cuando los niños las consumen:
Afecta la memoria
En los primeros años de vida, que son cruciales para el aprendizaje y desarrollo de los niños, el abuso de la comida chatarra puede provocar menos capacidad de atención, deterioro de la memoria y peor humor, según datos del American Journal of Clinical Nutrition.
Riesgo de depresión
Los niños tienen un 50% más probabilidad de padecer esta enfermedad al consumir esta comida en su dieta diaria. Los alimentos ultraprocesados son ricos en grasas trans que alteran la composición de la microbiota intestinal, situación asociada con alteraciones en el estado de ánimo, según la revista The European Journal of Neuroscience. No te pierdas: Comida chatarra y obesidad en tiempos de coronavirus
Comida chatarra provoca debilidad y fatiga
Los niños, de forma natural, poseen mucha energía. Sin embargo, la comida chatarra puede hacer que decaiga, provocando que sufra debilidad y fatiga que se puede volver crónica.
Problemas digestivos
La comida chatarra también puede ser causante de problemas digestivos graves, debido al exceso de aceite con que se prepara, y que dispara la producción de ácido en el estómago. Esto agrava el reflujo, por lo que la falta de fibra facilita la aparición de afecciones, constipados y hemorroides.
Comida chatarra causante de enfermedades cardiovasculares
Aunque estas se asocian con la edad, déjanos decirte que esta comida puede ser causante de estas enfermedades en niños, debido a que aumenta los niveles de triglicéridos y colesterol LDL. La enorme cantidad de grasas trans y saturadas, más los elevados niveles de azúcar provocan que la sangre lesione los revestimientos de los vasos sanguíneos.
Problemas renales
Las sales procesadas aumentan la secreción de enzimas, que afectan el balance de sodio y potasio en el organismo, generando hipertensión y un mal filtrado de toxinas, debido al daño ocasionado a los riñones. No olvides conocer más tips de salud y nutrición para mejorar tu calidad de vida y la de tu familia, sólo en Cocina Fácil