El cuidado de la piel se ha vuelto primordial en los últimos cuatro años, existen rutinas de skincare, tratamientos belleza y también alimentos que ayudan a tener una piel sana, radiante, limpia y sobre todo rejuvenecida, por ejemplo, la yaca, una fruta exótica que tiene múltiples beneficios.
Se trata de un fruto que pertenece a la familia de las moráceas, la misma de los higos y las moras. Es originario del suroeste de India y el este de Malasia, pero actualmente se cultiva en otras regiones tropicales de Asia, África, América y Oceanía.
La yaca es una de las frutas más grandes del mundo, ya que puede pesar hasta 50 kilos y medir 90 centímetros de largo. Tiene una corteza verde o amarilla, con protuberancias y espinas, y una pulpa amarilla, carnosa y aromática.
Tiene un sabor dulce y ácido, que recuerda a una mezcla de mango, naranja, plátano, manzana, papaya, piña y guanábana. Por eso también se le conoce como “la fruta de los 7 sabores” o “la fruta con el sabor de todas las frutas”.
Los beneficios de la yaca para la piel
Aunque la yaca tiene muchos beneficios, es conocida especialmente porque ayuda a tener una piel hermosa. A continuación te dejamos algunas propiedades que aporta esta fruta:
- Hidrata y suaviza la piel, por su alto contenido de agua.
- Estimula la producción de colágeno y mantiene la piel firme y luminosa, por su vitamina C.
- Protege la piel del sol y previene el envejecimiento, por sus pigmentos flavonoides.
- Regenera las células de la piel y promueve una apariencia radiante, por su vitamina A y zinc.
- Alivia las heridas en la piel, por su proteína y su efecto antiinflamatorio.
- Previene el acné y las infecciones, por su efecto antibacteriano y antifúngico.
- Nutre y revitaliza la piel, por su contenido de potasio, hierro, magnesio y calcio.
Otros de los beneficios que tiene la yaca son que mejora la digestión y previene el estreñimiento, gracias a su alto contenido de fibra.
También fortalece el sistema inmunológico y previene infecciones, por su riqueza en vitamina C y antioxidantes. Asimismo, regula la presión arterial y previene la anemia, por su contenido de potasio y hierro.
La yaca se puede consumir de diferentes formas, según su grado de madurez. Cuando está verde, se usa como verdura, se cocina al vapor, se fríe o se asa. Cuando está madura, se come como fruta, se hace jugo, licuado, batido, helado, yogur o postre.