Nada mejor que unos arandanos frescos para aprovechar los múltiples beneficios que ofrece este pequeño fruto. Sabemos que no son económicos y que, al igual que otros frutos secos, su precio suele ser elevado. Pero te tenemos una buena noticia: hoy puedes aprender cómo germinarlos y cultivarlos en casa. Aunque no lo creas, es muy fácil y te vamos a enseñar un paso a paso para que tengas tu planta y disfrutes en grande el sabor de tus arándanos. Te puede interesar: 5 super alimentos que no pueden faltar en tu dieta
Cómo germinar y cultivar arandanos frescos paso a paso
Necesitas:
- 1 maceta de tamaño regular
- 500 g de arcilla para jardín
- 1 kg de tierra ácida
- Arándanos frescos (ojo: no deshidratados)
- 1 kg de tierra negra
- 1 kg de tierra con hojarasca
- Agua
- Vaso de plástico
- 1 servilleta de papel
- Plato de plástico
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- En primer lugar, coloca una capa arcilla en el fondo de la maceta, debe quedar bien expandida. Posteriormente, agrega una capa de tierra ácida, luego la tierra negra y finalmente la que tiene hoja.
- Mientras, a los arándanos, retírales la pulpa y limpia la semilla. Colócalas en el vaso con agua y deja reposar por un día. Desecha aquellas que floten, pues ocuparemos las que se hundan, ya que tienen más posibilidad de germinar.
- A las semillas seleccionadas, colócalas en un plato sobre una servilleta de papel húmeda. Deja reposar en un lugar cálido y mantén la humedad de 7 a 10 días.
- Finalmente, ya germinadas las semillas, realiza pequeños orificios en la tierra y colócalas dentro. No cubras por completo de tierra el brote.
- Riega 1 o 2 veces por semana y coloca en un lugar con resolana.
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