En estos días hemos visto que muchas de las marcas de queso acaban de ser prohibidas por la Profeco y la Secretaría de Economía, lo cual nos deja con una gran duda: ¿cómo podemos reconocer un queso de buena calidad? Hoy te compartimos tips para que puedas elegir una buena opción de queso para ti y tu familia. ¡Toma nota! No te pierdas: Comer queso, ¿bueno o malo para la salud?
Características de un queso de buena calidad
El queso es un alimento sólido obtenido por la maduración del cuajo de la leche tras descartar el suero. A pesar de que este proceso se utiliza para todos, hay muchos tipos de queso que se obtienen según el tenor de su pasta, el origen de la leche con la que se elabora, el método de fabricación y el grado de estacionamiento. Son las bacterias “buenas” las encargadas de acidificar la leche y que definen la textura y sabor de la mayoría de los quesos. Eso sí, cada una de sus variedades tiene sus secretos para ser un queso de buena calidad. Los quesos los clasificamos en duros, semiduros, blandos y muzzarella. A continuación, te compartimos sus principales características para que aprendas a identificarlos: Te puede interesar: Tu queso parmesano podría tener pulpa madera
Duros
Son aquellos con mayor tiempo de maduración y son ideales para rallar (provolone, cheddar, parmesano, cotija y grana, entre otros). Estos deben ser de grana pronunciada, de masa cerrada y también quebradiza. Mucho ojo: no tiene que presentar ojos ni grietas en su corteza ni en el interior. La corteza debe ser delgada y de textura homogénea, seca y son películas oleosas. Te interesa: 4 tipos de queso y sus beneficios para la salud
Semiduros: cómo identificar un queso de buena calidad
Su textura es más suave y levemente dulce, con una gran variedad en el mercado y que se pueden dividir entre quesos con ojos y sin ojos (gouda, manchego, provolone, gruyere. chihuahua, oaxaca, etc.) Para elegirlo, podemos revisar su textura aplicando una leve presión. Los ojos característicos de estos quesos son redondos, bien definidos, brillantes y distribuidos de forma homogénea. Por otro lado, si queremos un queso sin ojos, de sabor más suave, debemos fijarnos en su textura suave y homogénea, y que no presente grietas en su estructura. No te puedes perder: ¿Quesos sin vacas? Es posible
Blandos
Son de textura cremosa y un sabor más suave, lo que los hace perfectos para combinar con muchas comidas (brie, crema, fresco, fetta, untable, ricotta, panela, entre otros). El queso cremoso tiene agregada la materia grasa, lo cual aumenta su cremosidad. Eso sí, deben tener una textura lisa, sin grietas ni ojos de ningún tipo. En cuanto a su color, debe ser parejo en toda su estructura ni presentar bordes más oscuros. Además, no debe contar con suero, ya que el queso no debe desuerarse en ningún momento. Te puede interesar: Estudios revelan que comer queso te hace adelgazar
Mozzarella: características de un queso de buena calidad
Son quesos de pasta hilada y que se elaboran fundiendo por temperatura las proteínas obtenidas durante la coagulación de la leche, de sabor suave. Entre sus características de calidad. su sabor debe ser levemente ácido y de textura homogénea. Su color debe ser blanco amarillento, más claro que el color de la manteca. En cuanto a su textura, tiene que ser lisa, pareja y sin grietas. No deben liberar aceite y su aroma tiene que ser tenue, ni presentar un olor fuerte o ácido. Descubre más tips para cuidar de tu salud, alimentación y estilo de vida en Cocina Fácil