Si quieres saber cuáles son los chiles más populares en México, aquí te contamos sobre algunos de ellos para que sigas apreciando la comida mexicana.
Los mexicanos tenemos fama de aguantar de todo, especialmente los sabores picantes. Por eso los chiles son básicos en la cocina y paladar mexicano. Tan solo en nuestro país existen alrededor de 64 variedades de chiles diferentes y los disfrutamos en dulces, en guisados, en salsa o enlatados. Pero si quieres saber cuáles son los chiles más populares en México, aquí te contamos sobre algunos de ellos. No olvides pasar a escuchar “La Probadita”, un podcast de Cocina Fácil.
Chile jalapeño
Empezamos desde la corona, el jalapeño es el chile más consumido por el mexicano a lo ancho y largo del territorio. Su nombre procede de la ciudad de Jalapa, en el Estado de Veracruz, aunque también se conoce como “chile cuaresmeño”, pues en el centro del país este tipo de chiles se suelen preparar rellenos de queso o atún durante la cuaresma. Por su sabor picante medio, ligeramente amargo pero fresco y aromático, el jalapeño es sumamente versátil. Combina muy bien con platillos cargados como en tamales, salsas de queso o rebozados, mientras que también son excelentes para acentuar el sabor en platillos más frescos como guacamole, ceviches y ensaladas. Aunque la forma consentida para muchos, es comprarlos encurtidos en latita para disfrutarlos con una torta, arroz o en un sándwich.
Chile poblano
El poblano es uno de los chiles más grandes cultivados en México. Su piel es carnosa, liviana y casi no pica, lo que lo vuelve perfecto para guisos tradicionales. Además su sabor y textura combina muy bien con platillos que incluyen queso, carne o crema. Pero cuando el chile poblano se seca, se le conoce con el nombre de chile ancho, el cual es muy utilizado en moles, caldos y salsas. Algunos deliciosos platillos que incluyen chile poblano son las rajas con pollo, los chiles rellenos y por supuesto, los chiles en nogada.
Chile serrano
Después del jalapeño, el chile serrano es la segunda variedad más producida en México. Es pequeño, de color verde brillante o rojo, (dependiendo de su estado de maduración), y suele comerse fresco y a mordidas. Obviamente sin quitarles las venas para aportar un toquecito extra a sopas, arroz o guisados en general. Y si alguna vez te has dado una buena enchilada en los tacos, probablemente este sea el culpable, pues su nivel de picor es excelente para preparar salsas. Especialmente salsa verde y pico de gallo.
Chile piquín
Finalmente, tenemos al famoso chile piquín. Que aunque todos lo identificamos por ser pequeño, redondo y color rojo intenso, en realidad el piquín adopta distintos nombres según la región en la que te encuentres: “Chiltepín” en el noroeste, “mosquito” en Tabasco, o “chile de monte” en el centro de México. Pero tenga el nombre que tenga, podemos identificarlo fácilmente por su nivel de picante. Y es que pica CAÑÓN, por eso es excelente para elaborar salsas de molcajete o resaltar el sabor en una salsa macha. Aunque también puedes disfrutarlo en polvo para acentuar la acidez y dulzura de manzanas, mangos, pepino o jícama. Pues su versatilidad y ligero picor, es el acompañante perfecto para un snack ligero y refrescante. Así que recuerda, si lo que buscas es una buena salsa que te despierte los sentidos, los mejores candidatos son el chile serrano y el chile piquín. Pero si lo tuyo lo tuyo son los guisados sin tanto picor, entonces el chile poblano te sacará del apuro. Mientras que para darle un toque “extra” de sabor a tus sándwiches o platillos, el jalapeño resaltará los sabores sin saturar tu paladar. SIGUE LEYENDO: Cultiva tus propios chiles en casa con estos fáciles pasos Curiosidades de los chiles mexicanos: los más sabrosos del mundo
