Toda buena comida comienza con una actitud de agradecimiento por los alimentos que vamos a comer y también por los seres queridos con los que los compartimos. Por eso, una oracion para bendecir los alimentos es una costumbre que nunca deberíamos perder. Hay oraciones breves y muy bonitas que puedes practicar y memorizar para compartir con tu familia. Toma nota de cuáles son para antes de comer y después de disfrutar los alimentos. Te puede interesar: Consejos para crear hábitos alimenticios saludables
Oracion para bendecir los alimentos: 3 opciones para dar gracias antes y después de comer
Gracias por los alimentos
Señor, gracias por los alimentos que nos das
bendice las manos que los prepararon
y otórgalos a los que los carecen.
Dios mío, da pan a los que tienen hambre
y danos hambre de Ti a los que tenemos pan.
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Oracion para bendecir los alimentos: fruto del trabajo
Se empieza con la siguiente cita bíblica: No hay cosas mejor para el hombre que comer y beber, gozar del fruto de su trabajo. He visto que esto también procede de la mano de Dios. (Eclesiastés, 2, 24) Señor no diste la comida y la bebida, fruto de nuestro trabajo. Y te damos gracias porque todo esto que hemos recibido proviene de ti. ¡Bendito seas, Señor! Te interesa: ¿Qué se necesita para ser un santo en la iglesia católica?
Oración para bendecir los alimentos: compartir el pan
Se comienza con la siguiente cita bíblica: Dichosos los criados a quienes, al llegar su amo, los encuentre despiertos. Les aseguro que el amo mismo lo hará sentarse a la mesa y se dispondrá a servirles comida. (Lucas, 12,37). Señor Jesús, ayúdanos a permanecer despiertos para acoger gozosos tu visita. ¡Gracias pro ser el servidor de nuestra mesa! Bendice el pan que hoy vamos a tomar. No te puedes perder: Beneficios de comer en compañía que no habías imaginado
Oraciones para después de comer
Puedes elegir cualquier de estas opciones al terminar la comida:
- Señor, te damos gracias por todo lo que colocas a nuestro alrededor: un techo que nos protege, una cama donde descansar, y por la bendición de tener alimentos sobre nuestra mesa.
- Mi familia y yo nos hemos saciado, bendito Dios, con las bendiciones que nos has brindado y te damos gracias.
- Nos sentimos bendecidos de haber disfrutado los alimentos que ahora se convertirán en energía para el cuerpo y en salud par toda mi integridad, mejorando nuestras vidas.
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