Visitar Puebla es la oportunidad perfecta para disfrutar de un tradicional chile en nogada. Y es muy probable que allá tengas que probarlo en la versión capeada, puesto que para los poblanos “un chile en nogada que no está capeado no es chile en nogada”. Pero, ¿por qué el chile en nogada va capeado? ¿Es un mero capricho o hay razones de peso para prepararlo de este modo? Hoy te explicamos los motivos.
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¿Por qué el chile en nogada va capeado? Descubre lo que hay detrás de este platillo
El chile en nogada ya cuenta con más de 200 años de antigüedad, y es una de las joyas culinarias de Puebla y todo México. Y, aunque como ocurre con muchos platillos de la cocina mexicana que tienen muchas versiones, los poblanos defienden a capa y espada que este platillo se prepara únicamente de una manera, y esta es capeándolo.
Según información de la Secretaría de Turismo, el antecesor del chile en nogada se inventó aproximadamente en el siglo XVII, aunque su nombre era “chile relleno de frutas bañado en salsa de nuez”, y se trataba de un postre virreinal que no era capeado.
Este platillo, tal y como lo conocemos ahora, nació en el convento de Santa Mónica, donde monjas agustinas lo prepararon para deleitar al general Agustín de Iturbide con productos de la temporada y que tuviera los colores del Ejército Trigarante.
A pesar de que en un inicio la receta se desprendió de un postre virreinal que no iba capeado, de acuerdo con el recetario El cocinero mexicano, de 1831, indica que el chile en nogada se prepara capeado.
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Hay dos razones por las cuales es importante capear el chile:
TÉCNICA CULINARIA
Según la receta de 1831 y expertos en cocina, es necesario sumergir los chiles en una mezcla de huevo batido y freírlos para proteger y realzar el sabor de los ingredientes principales.
TRADICIÓN
Como ya has leído, el chile en nogada recuerda a los colores del Ejército Trigarante, que actualmente también son los colores nacionales (verde, blanco y rojo). Pero, ¿qué hay del color que le da el capeado al platillo? Pues este recuerda al oro, color de la realeza y la victoria por excelencia.
También se dice que este color dorado recuerda a la época virreinal, momento en que los chiles en nogada fueron inventados.
Eso sí, no hay olvidar que mucha gente prefiere comer los chiles en nogada sin capear para cuidar de su salud, y aún así, saben muy deliciosos.
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