Yogur para los niños
Si tienes el problema de que tus niños no quieren tomar leche, dales yogur, pues según expertos en nutrición infantil, es el sustituto perfecto de la leche porque posee los mismos elementos nutricionales: agua, grasas, minerales, proteínas y vitaminas, pero también lactobacilos.
El yogur ofrece otra ventaja: es más fácil de digerir debido a que no contiene lactosa, la cual ha sido transformada en ácido láctico gracias a la acción de los lactobacilos. Dicho ácido, de consistencia espesa y cremosa, resulta muy benéfico para el aparato digestivo de un niño porque desempeña un papel regulador de la flora intestinal, con lo que se previenen infecciones intestinales. Además, es excelente para combatir las diarreas infantiles, tan frecuentes en la época de calor; o por el contrario, puede ser laxante al favorecer el óptimo funcionamiento de los intestinos.
Por todo esto, inclúyelo en la dieta cotidiana de tus pequeños: